Gliese 581c es en teoría el planeta más aceptable para soportar una colonización, exceptuando que es un infierno de planeta. Está anclado a la órbita de una estrella enana roja y está a una distancia tan cercana que si estuvieras del lado donde el planeta se ubica de frente a la estrella, te derretirías en un instante, mientras que estar del lado contrario te congelaría. En el estrecho cinturón habitable en medio de ambos lados hay otros retos, el cielo del planeta es terriblemente rojo pues se encuentra en la frecuencia más baja de nuestro espectro visual, además las plantas fotosintéticas son sometidas a la radiación infrarroja tornándose negras.